Ya no cien. Ni doscientos, sino mil. Mil entradas tiene Bocuti.
Empezamos siendo una desorganización, un quilombo bizarro que pasaba de pensamientos, a sentimientos, a fotos sin sentido, a puteadas porque sí, a noticias de actualidad, todo en un día. Bocuti caminó mis cambios a la par mío y, aunque es un Blog, mucha vida lleva encima como para no sentir nada. Dejé y voy a dejar acá, siempre, parte de mi, para quien quiera y guste leer.
Me han dicho que entradas estaban muy buenas, otras que eran una pelotudez y yo un pelotudo, que se me subió la fama a la cabeza, que antes era más piola, que me tengo que dedicar a escribir, que hice cagar de risa a alguien, que tuve demasiadas visitas en una semana, que gustó, que no gustó, lo que siempre pienso es que generó algo, bueno o malo, y todo lo que haya generado es productivo. Por lo tanto, el camino de mi Blog está marcado, es un reflejo de mí, mi vida y mis cambios.
1 comentario:
me gusto esta
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