Te gusta el blog?

jueves, 11 de febrero de 2010

"MI HISTORIA DE SEXO" (parte III)

Ante el éxito rotundo de esta historia corta, me dí cuenta de que no son sólo uno, ni dos, sino tres! los lectores que siguen mi Blog hasta en sus entradas más largas. Gracias uach@s soy fan suyo.

Ahora a lo nuestro:

Desde donde estábamos hasta la habitación de Mónica, había sólo unos metros que, por las ganas que teníamos, los hicimos al vuelo. En la puerta a ella se le resbaló la llave de la mano y se cayó al piso. Esto nos puso más nerviosos todavía. Las recogió y abrió. Entramos riendonos y casi tropezando cuando de golpe, en una de las camas, estaba Raquel recostada...

-...- Me quedé mudo. Menos mal que Mónica usó un as que tenía bajo la manga...
-Ves?-me dijo guiñandome un ojo- nuestra habitación es un poco más chica, solamente está mas ordenada. Ey Raquel qué haces acá?- simulando no haberla visto
-Hola chicos, me siento mal, me duelen mucho los ovarios y la cabeza, no tengo voluntad ni de levantarme a saludarlos, perdón-
-Ah..., QUE TERRIBLE CAGADA QUE TE PASE ESTO JUSTO AHORA-
-Sí, con lo linda que está la fiesta... lo se- por suerte Raquel no entendía el doble sentido de Mónica- y ustedes que hacen acá?-
-Es que...-
-Es que él está convencido de que su habitación es mas pequeña que la nuestra y quiere cambiarnosla-
-Cambiarnos qué cosa?-
-La habitación-
-Pero si nos vamos mañana!-
-...-
-..., claro, eso estaba tratando de explicarle pero él estaba convencido de que estaría más cómodo pasando la noche acá-
-No lo se, estás bastante loco Charly, no te entiendo, deja de joder y dormite en tu habitación o anda a disfrutar de la fiesta-
-Sí, mejor es que nos vayamos-
-Dale, te dejamos tranquila-
-Bueno, gracias chicos-
Cerré la puerta, ambos nos apoyamos contra la pared, mirando al techo, respiramos profundamente, exhalamos con fuerza, y nos miramos.

-Que cerca que estuvo- le dije-
-Menos mal que no entramos a los besos-
-Ni me lo digas...-
-Y ahora qué hacemos?-
-No se, qué hacemos?-
-Te estoy preguntando a vos!-
-Qué se yo!-
-Y bueno, bajemos a la fiesta separados, y será en otro momento-
-Mañana nos vamos igual-
-Ya lo se, pero bueno si no se puede es por algo-
-Bueno, andá vos primera yo después bajo-

Mónica enfiló para las escaleras y desapareció. Volví a mirar al techo, ahora con bronca, me quedé pensando un rato, y cuando consideré un tiempo suficiente como para no levantar sospechas, bajé también.
En el salón no quería hacer nada, estaba enloquecido, mi temperatura era un poco más alta de la habitual y me reventaba no poder conseguir lo que quería, mucho más sabiendo que era esa noche, o no era nunca más. La frase "estamos de vacaciones" que ella me había dicho, me marcaba definitivamente un plazo para lograr lo que quería, y ese plazo terminaba esta misma noche. Sentado en el sillón me exprimía el cerebro buscando una posibilidad, buscando un lugar, y como la solución no fue fácil, comencé a pensar en lo difícil, comencé, a complicar las cosas. Mis ideas eran cada vez más rebuscadas, pero no me importaba absolutamente nada. Así es como llegué a robarle la llave de su habitación a Ramiro, luego a hacerle señas a Mónica y luego a subir las escaleras y esperarla en el pasillo del primer piso. 
Su llegada no se hizo esperar.

-Qué pasa se te ocurrió algo?-
-Mirá Mónica, esto es un poco más jugado de lo que debería ser, pero no podemos dejar pasar esta noche-
-Qué? no me asustes Charly-

Le mostré las llaves de la habitación de los recién casados.

-Vos estás loco?-
-Sí puede ser, estoy loco por ir con vos a una cama esta noche-
-Charly...- me sonrió, definitivamente, sabía que esa sonrisa me podía- y si nos agarran qué hacemos?-
-Eso es lo que menos me importa ahora, vamos antes de que sea demasiado tarde-

La tomé del brazo y la subí por las escaleras a un ritmo muy veloz. Llegué a la puerta, abrí rápido y nos metimos. La habitación de Ramiro y Emilia era espectacular. Muy espaciosa, una cama matrimonial enorme, piso alfombrado rojo, y detalles lujosos. Cerré la puerta y automáticamente se trabó, perfecto. Me recosté en la cama mientras Mónica se metió al baño. Ya estaba sintiendo la gloria por anticipado. Todo aquello que había tenido en la cabeza durante ese tiempo, se iba a trasladar a lo real. Mónica salió del baño y ya estabamos dispuestos a todo. Le agarré la cara con mis manos y comencé a besarla. Pero, como si fuera a propósito, se oyeron ruidos de pasos en el pasillo y una llave intentaba entrar en la cerradura de la habitación.

-Son ellos Charly son ellos! qué hacemos?- me dijo Mónica desesperada.

Pero no hubo tiempo de responderle apenas la metí conmigo adentro del ropero, que por suerte era espacioso, Ramiro entró a la habitación con Emilia.

-Te digo que no las perdí, las debo haber dejado acá adentro antes de bajar!-
-Las perdiste Rami, estoy segura de que perdiste esas llaves-

Maldita suerte que se puso contra mí esa noche. Ramiro estaba buscando las llaves que yo tenía en mi bolsillo. Y ahora? iban a dar vuelta la habitación entera para encontrarlas, y sería un enorme problema para mí, pero mucho mayor para Mónica que no tuvo casi opción de rehusar mi alocada idea.
Emilia empezó a buscar en el baño mientras que Ramiro estaba revolviendo entre las cosas que había en la mesa de luz, de espaldas a nosotros. Y, sonará loco o irreal, pero ví la salida perfecta. Apenas asomé la mano por el ropero dejé la llave en el suelo y luego la corrí despacio con la pierna hasta alejarla lo suficiente, dejandola casi pegada a la cama.

-Qué hacemos Charly? nos van a descubrir- me susurró Mónica
-Shhh, no va a pasar nada vas a ver-

Finalmente luego de unos minutos muy largos, Ramiro dio con la llave y cayó en mi trampa.

-Mirá Emi, la encontré!-
-Ay dónde estaba?-
-Acá, al lado de la cama, no me acuerdo de haberlas dejado acá-

Se acercaron y se dieron un beso, yo alcanzaba a verlos por la apertura de la puerta.

-Y ya que estamos acá por qué no nos tomamos un tiempo para nosotros?-
-Jaja te parece Emi?-
-Sí...-

Dios, no queríamos ver ese espectáculo y mucho menos desde el ropero.

-No Emi mejor bajemos a la fiesta y cuando ya estén yendose a dormir todos venimos, te parece?-
-Bueno, dale-

Por suerte se fueron y en cuanto cerraron la puerta tanto Mónica como yo escapamos del ropero saltando.

-Aprovechemos ahora y vámosnos de una vez, olvidemosnos de esta locura- me dijo ella
-Sí, disculpame por esto que te hice pasar al pedo, vamos-

Nos acercamos a la puerta y jalé la manija. No abría. Intenté varias veces abrir pero no pude, estabamos encerrados...

-Mónica, estamos encerrados, nos quedamos encerrados-

...

Continuará...

2 comentarios:

Sebas dijo...

hijo de putaaaa jajajjaa, genio

Yami dijo...

QUE SE LA COJA DE UNA PUTA VEZ!

 

Blog Template by YummyLolly.com - Photoshop Brushes Obsidian Dawn