Ahora oigame una cosa, muchacho. Usted es uno más del montón, no se destaca por nada, excepto por sus defectos. Todos sabemos aquí que sus defectos lo hacen quien es en realidad. Y sin embargo tiene muchos amigos, tiene mujeres, tiene hijos, tiene una vida buena y próspera. Entonces fíjese usted la LOTERÍA que se sacó. Y sigue claudicando, y sigue perdiendo el tiempo, y sigue agrandando sus defectos, y sigue de soberbio por la vida. Y quiere guapear y llevarse el mundo por delante. Fíjese que se sacó la lotería y tiene un tesoro que esta derrochando.